viernes, 11 de abril de 2014

El ser ecuánime, no existe

Mortal, déjame hacerte una interrogante, que consideras equitativo en una decisión, como saber si está bien distribuida la demanda; dime, acaso sabes al instante de una gresca quien resulta el honesto sin haber tanteado antes al mentiroso, es que acaso la moral en la que vivimos no es más que una mofa ancestral tomando como raíz unas reglas de una sociedad imparcial, lo justo, ¿Lo es?

Un precepto no solo es decidido por el hombre a cargo, este se remonta desde un inicio como partición, ya sea por una ideología popular o  la ansiosa necesidad de jerarquizar a la masa (prioridad ante todo) de donde se origine es lo de menos para explayarse solo necesitamos mirar con atención cualquier situación alegórica al tema, conflictiva, o sosegada no existe diferencia, todo recae en una conclusión, si no fuera transcurriendo ya lo obvio, estaría en todo mi derecho de adjudicarme un arbitraje, favoreciendo a mi criterio. Es decir, todo va de acuerdo a la formación, el hijo de un delincuente, criado, alimentado, y educado ejerciéndose sobre ese tipo de bases, le va a parecer totalmente ridículo una reprimenda fundamentada por sus acciones, ya que su contexto es diferente y no es nada atractivo que reciba un castigo innecesario a causa de la forma de vida que posee; ¿igualdad, meritocracia, de acuerdo al estatus, o alguna otra posibilidad? ¿Indulgente entonces es considerado un concepto auto critico? Coexisten, pues, infinidad de respuestas basadas desde diversas perspectivas políticas o filosóficas. El mundo es cruel, mucho cuidado con lo que respetas, tus decisiones, perplejo te puedes quedar al saber que para otros es un acercamiento a lo irrisorio, sé tolerante, porque otros te toleran a ti.



Atento entonces a lo que defiendes, que puede darte la espalda, cuídate a ti de ti, cuídalos a ellos de ti, y cuídate a ti de ellos; injusto es sí, pero que se puede hacer. 

miércoles, 2 de abril de 2014

Conflictivo narrador

Ya que el tiempo que ha pasado desde mi última redacción, ha sido por demás distante, voy a continuar este pobre segmento de grafías con algo sencillo a la comprensión, considérese entonces querido lector afortunado, póngase cómodo, centre su atención y lea hasta donde usted proyecte que el discurrir se encuentre atiborrado; obvio solo es una narración.


Sin atribuirle nada interesante a mi rutina diaria, despierto y son las 2 de la tarde, gastado, ojeroso, y aun con el pesar de la anterior noche, no me importa si son unas benditas 8 horas cumplidas, no me interesa no haber hecho algo productivo precedentemente, por ultimo ni haber comido, única variante anhelo dormir más; despierto y ahora si en definitiva 1 hora más tarde, como algo, vaya sorpresa no escucho respiro alguno obviando a la mascota claro, de calor humano. Encamino vagamente a la cocina, encuentro, caliento, y como; me pongo a ver un poco de tele; verán normalmente la nulidad de quehaceres me atosiga, sin embargo no encuentro determinada “motivación” de fatigarme la vida con infortunios y dejo pasar el tiempo a manera de desconocer su meritoria importancia; son las 6, excluyendo las menciones variantes de verbos, no he cometido cualquier otra proeza digna de contarse, al menos mate a esa mosca, maldito volador, ah claro, juguetee un lapso con mi no muy brillante can; son las 8, alcanzo a notar ya cierta molestia en mi sentido auditivo, compañía, habladurías, conversaciones de sus travesías de este día, planificaciones de lo que pudo ser mañana, ideas de lo que será el fin de semana, problemas, no sé cómo es que luego se atreven a cuestionarme del posterior dolor de cabeza, raudamente subo y me encierro en mi pieza, cojo la laptop y vago en línea; son las 11, recapacito, de pronto una deslumbrante y no muy insospechada idea pasa y tan reprimida estaba que su relevancia es notoria, porque no salir a caminar un rato, me visto, audífonos en el bolsillo, mi celular en el otro, fácil fue adivinar a donde me dirigía, un curioso parque, desolado a estas horas, y para mi suerte higiénico, a pesar de ser hogar de entrenadores de mascotas, amas de casa, servidoras del hogar, parejas tan afectivas públicamente sin ningún resguardo de caricia, dios, escandaloso a veces se considera el enérgico menester que llama sexualmente para toda edad, podrías hacer una escena porno en cada asiento en los que los ves; llego al centro, reside en abandono como lo sospechado, y contento por eso me siento a observar, muy normal en mí, a la gran fauna de árboles tan grandes como edificios. Desconozco si me concentro mucho o simplemente me pierdo, sea cual sea la razón fue insólito que una pequeña ardilla pase por mi costado, me asuste, la maldecí, cogí una piedra y se la tire, que buena puntería tengo pensé mientras el pobre animal fugaz escapaba de mi banca, lo posterior fue un análisis que a continuación voy a detallar, regrese a casa y me dormí con la molestia de discurrir en la comparación mencionada.


Relato la rutina con la frescura del caso, para la comprensión más rápida; existe un gran defecto en conjunto para todo aquel que puede fijar su atención en algo, usted por ejemplo en la lectura; acaba de tragarse mi día entero sin ningún recato de drama preponderante; podría haber hablado la razón de mi indolencia rutinaria, el ignorar a mi familia, la proeza que tuve que hacer para matar una mosca, la molestia de toda la gente que por la mañana fue al parque, la búsqueda insaciable de querer encontrarme señero, si la callejera ardilla regreso a darme un mordiscón por mi reacción, o por ultimo como es que pude conciliar el sueño con un problema tan grande dando vueltas en mi cabeza; lección aprendida, mucho cuidado en lo que ha fijado puede no siempre parecer lo que es.



jueves, 21 de noviembre de 2013

Contingencia inevitable: El poder del saber

Hablamos de conocimiento, a manera de algo cotidiano y habitual, engañados por nosotros mismos ya que podremos expresarnos como se nos de la gana, puesto que la definición no es más que una estructura instaurada análogamente, demostrando una vez más el horrible manejo de lógica humana, siempre echándole la culpa a lo incógnito excusándose en su cultura. ¿Quiero entender algo y no puedo? Bien, hagamos lo más simple, cojamos la certidumbre cognitiva mensurable según respuestas a un porque, como, cuándo y dónde. Ridículo.

Desvarió, si no me equivoco el poder del saber esta ya infravalorado por debajo de una maldad disfrazada, y no es para menos el pensar de esa forma, razonable. Existen muy pocos apremiantes de esta rama que verdaderamente saben utilizar lo cabal, para el bien; así es, por mi parte considero virtuoso a un infinito poseedor de información, exquisito y obviamente inequívoco de cualquiera de sus premisas, verdaderamente es aquel el mencionado con esos caracteres que se merece elogios departe de los subsiguientes. No otro, no el inexacto, actualmente no conserva lugar para los dudosos, es o no.
Explayando esta información, y dada ya mi disculpa por la pequeña crítica, comienzo a describir la sintaxis del hecho en si, esta herramienta sobre todo es una de las más perjudiciales dentro del manejo de las masas, ya que se dirige de una manera completa ofensiva al razonar de cada uno; gana más de lo que alguien pueda figurarse, derivando a la contracción es claro que existe un máximo beneficio, pero como lo mencionado anteriormente, son pocos los que manejan un claro y ecuánime objetivo, lamentando, yo más que todo querido lector, declaro que lleva toda una vida de práctica efusiva para ver un poco de sus logros, más adelante podría intentarlo; el uso íntegro de la manipulación especulativa, depende de centrar uno mismo lo que desea y reflejarlo en el otro, cuidado con sus mentes, para los que anhelan el usufructuar las de otras.

No es mi mejor redacción, sin embargo, es un instante de iluminación a lo que podría llamarlo psicoanálisis auto pedagógica.

martes, 10 de septiembre de 2013

Parte 3: Observador sentimental ( entendimiento requisitorio )

Esos momentos en los que uno, percibe, que tiene que retener la situación para observar con serenidad y mucha lentitud el pasar de las cosas. Ese tipo de coyuntura, pasa, siempre por algún argumento, por más pequeño y trivial que este sea, solo queda dejarte llevar por aquello que es natural y más que ineludible para nosotros. Recibe, analiza, comprende, entiende, expresa, llega a una conclusión, y se rige a lo que salga. A continuación una anécdota que sirva didáctica-mente hablando, a quien le llegue a interesar.
Me senté junto a los libros desgastados de mi viejo librero, agarre uno recordando situaciones en los que el contexto era hermoso y lo único que me importaba era el hecho de estar feliz, tranquilo conmigo mismo, derrochar humildad, conseguir la paz, mediante un simple equilibrio, relativo a lo dual. Pasado esto, cogí la laptop y empecé a leer conversaciones, deprisa mi pesar se hizo presente en lo que dije, en lo que pensé cuando lo decía, en lo estúpido que fue no analizar antes, cuando mi coherencia y el buen raciocinio me habían abandonado, cuando simplemente fui con la corriente y la deje llevarme; lección aprendida empíricamente, endulza tus palabras, no sabes cuándo te las volverás a regurgitar tú mismo; habido ya finalizado esto, abrí otra web, buscando la eterna necesidad comunicativa regida por la sociedad (para variar); al instante noté que, la red, por no mencionar cuenta personal y discreta, de un amigo se encontraba abierta, no sé atribuir una lógica explicación a lo siguiente, llamarlo curiosidad me tranquilizará por ahora; pero a propósito me enfrasque en buscar y querer saber, como aquel tipo había podido conseguir una relación (del índole afectiva obviamente) de la cual me había ya hablado bastante, al punto de hartarme y hostigarme con el tema, mi intriga era clara, porque ésta era tan estable y duradera? Todo aquello que el adolescente alborotado por las hormonas, por su esponjosa personalidad, por su desesperada averiguación, de encontrar alguna persona aparte de su familia, que apoye, ayude, aconseje, comprenda, y prediga su personalidad y temperamento en su alejado y solitario campo a donde este mismo se abre paso, queriendo saber que deparara en su no muy lejano futuro, además claro de satisfacer el hecho de poseer a alguien de tu sexo opuesto (no generalizo, también se da el caso análogo), acaso todos esos requisitos, que para mí eran primarios y hasta vastos, los habría encontrado en su pareja? ¿Y de ser así, como hizo a una edad tan joven para atinar correctamente? Continué, leí, leí, leí todo aquello que se decían, leí queriendo aprender todo eso que sentían, leí, queriendo estar en su lugar, para recibir el afecto y el solo cognitivo que ellos sentían, leí, para detallar en que momento yo fracasé, y no pude lograr lo que ello
s habían logrado; Y centrado en un punto, lo entendí, entendí que era uno propio, no eran ellos ni la intensidad con la que interactúan; palabras van y vienen, hechos quedan, y de uno mismo depende si se va a convertir en un hermoso recuerdo, o en un pésimo olvido, ellos caen como todos, pero saben que es recíproco el desafío de superarlo, de su entendimiento no escapa que algún día tendrá que acabar, ya que son jóvenes, la ilusión es numerosa y la vida larga, sin embargo mientras coexistan en este presente felices el uno para el otro, es amor infinito, entienden no poder vivir de sueños, pero jamás se limitan a fantasear los nombres de sus hijos, miedo a que alguien pueda separarlos? Jamás. Solo temor a que ellos puedan decidir hacerlo.

Fue es y será la última vez que intente averiguar cómo relacionarse humanitaria mente  Una vez más que hago yo, hablando sobre amor. Veamos de qué se trata, en fin y al cabo todos somos mortales y poseemos un fin.

viernes, 6 de septiembre de 2013

Autocrítica

Cómica, se le podría llamar a la forma en lo que la sociedad  trata de encerrar la banalidad de las personas al crearse un prejuicio necesario, servido para camuflar sus esperanzas, creencias, en objetos o seres cognitivos, o en lo más duradero, pero cambiante, una simple ilusión.
Considérese una idiosincrasia propia, el querer buscar un culpable a esta aferración, pero como ya lo repetí antiguas veces, también estoy dentro de este especie a la que llaman humanidad, con todas sus defectos  y virtudes, me parece, no término equivocado, me disgusta el anhelar razonar que nuestra enseñanza básica desde que empezamos a convivir en brigadas, o del alguna otra forma cooperativa, es adoctrinar a todo ente que pertenezca al grupo,  que es un dispar, alguien distinto, desemejante, apoyándose en los argumentos de rebeldía que podríamos tener con las reglas, y que naturalmente se encuentra en nuestro funcionamiento neuronal, lo que conocen ellos,  y lo que quieren conceptualizar como único, se puede apreciar aun siendo un tipo de organismo algo disfuncional que es encubrimiento la aseveración de nuestro propia ideología, sin embargo continuamos con nuestras peripecias, disyuntivamente, siempre auto argumentándonos que nuestra decisión es correcta, y si en caso no fuera así, es algo imaginativo o inmoral; una extrañeza, una vez más inventada propiamente por nuestra mente en base a la usanza.

No diré haber descubierto esto pero lo repetiré querido lector, para que vuelva a descubrir lo que dentro de sí, ya sabía: Creé en lo que quiere creer, da la razón a lo que piensa coherente, decide, por normas puestas por usted mismo, siente, lo que desea sentir. Llámalo idiotez, incluso podrías echarle la culpa a una incógnita cosmológica, como desee usted, al final eres tú y nadie más.

miércoles, 19 de junio de 2013

Enigmática indagación

Poseemos dentro de nuestra ya tan compleja función nerviosa, una perfección en los engranajes para la buena sintaxis; esta conlleva a querer aferrarse al equilibrio de uno mismo, y no a la perfección cómo definiría el cosmos; ya que ésta al igual que el cosmos, es tristemente incomprensible.
Sin más derivadas, y para parar con mis cavilaciones ya tan subestimadas, me encierro en mi tema, motivo de creación argumentativa, crítica, comprensiva, y tal vez hipotética, de lo que puede implicar la trama del equilibrio, éste como bien se conoce, se da a cabo por una fuerza de dimorfismo,  conservar el contrapeso, y obtener todo equiparablemente es un gran denuedo, ya que la reciprocidad del todo trae un increíble pesar.
Si la felicidad, el gozo, el sosiego, el festejo y muchas otras cosas positivas existen, son a causa de que su antagónico también, no existe amor sin odio, ni odio sin amor, recalco que solo saco y escribo de lo que ya nosotros hemos confirmado en nuestro subconsciente  según Freud; la concomitancia de esto, con el comportamiento demostrado y no, es muy difícil de afrontar, véase acá la fortaleza de una persona, consejo?  No pretendan ser como yo (solo opinión acotada), créanme, no quieres ver a tus compañeros tristes, llorosos y melancólicos, y que se lleven la sorpresa que tu estas como un día cotidiano, de esos que el perro te despierta y te dio flojera de ir a donde te pueda arrastrar la rutina, o ellos felices, celebrando, jocosos y una vez más tú, con la usanza del pasar; eso no se le llamada debilidad, por el contrario, es, déjame ser directo, ni más ni menos que cobardía servida en su máxima expresión, por miedo. Solo fue un consejo, tal vez yo me equivoque, porque suelo hacerlo, tal vez este en lo verídico, extraña sensación;  sin embargo eso no quita lo quejoso del ahínco, ni asemejarse a lo que podría llamarse proporción, esta aun para nuestra primitiva lógica esta fuera, como antes ya mencionado, de nuestra comprensión.

Que nos queda que continuar con nuestros dramas y mortalidades.

viernes, 12 de abril de 2013

Parte 2: Travesía del sentimental (¿Por qué ella?)

Decisiones,son las más relevantes en el marco de la vida, todos entrelazados por el pasar del tiempo, subyugados ante posibles conveniencias, tomadas empíricamente  o simplemente dejarse llevar por sentimientos, nada transigente a mi parecer.
Agrupadas a éstas palabras por demás ecuánimes, están inmersas las incanzables preguntas al elegir a alguien que sea capaz, de congelar tus sentimientos, alegrar tu tristeza y hacer soñar hasta la ultima pesadilla que posea; una vez más si me disculpa, querido lector, me adentro en el lúgrube camino del amor, a nivel de relación interpersonal, en fin y al cabo, solo soy otro joven enamorado, un error mío, un instinto natural.

Si alguna vez te has preguntado, por qué ella/el? Habiendo tantas personas en el mundo, todas diferentes, cada una con su chispa de especial, y originalidad, dispuestas a ofrecer cariño a quien se las dé. O es que acaso ella/el es perfecta? Pretenderé resumir aquello que estoy por convencido de saber, no, no es perfecta, su imperfeccion es hermosa, sus defectos son mi problemas, que estoy gustoso de afrontar, su inocencia es cautivadora, su sonrisa derrocha belleza, sus movimientos armoniosos, hecha en sí, para ser incomprendida, y actuar con un simple abrazo ese momento, cogerla de la cintura, cerrar los ojos y en un beso, decir lo que con palabras es imposible describir, es ahi, donde entenderá que no es necesario saber todo sobre ella, para sentir y comprender que es la persona que tanto anhelas. Coqueta, valiente, decisiva, divertida todo reflejado en su mirar, penetrante, a través de esos ojos, de esos hermosos ojos.

Así, cuando me llegan a preguntar por el furtivo amorío, que causa tan faustas palabras englobado en cándidas frases diciendo: ¿Por qué ella?, respiraré, observare su alrededor, y diré con toda cordura: "Porque es ella, y así me encanta".